El stand de la Diputación en la Feria de Albacete volvió a llenarse de color y juventud este sábado con la visita de los expedicionarios de la Ruta Inti 2025, recibidos por el presidente provincial, Santi Cabañero, y varios diputados.
Entre mochilas, sonrisas y camisetas amarillas, los jóvenes se acercaron al espacio expositivo dedicado a “El Pastoreo”, convertido este año en uno de los grandes protagonistas de la muestra.
El oficio pastoril forma parte de la memoria colectiva de la provincia y es, sin duda, una de las señas de identidad de la Sierra y de la llanura albacetense. Sin embargo, sobrevuela una pregunta inevitable: ¿estamos celebrando la vigencia del pastoreo o rindiéndole homenaje antes de tiempo?
En los discursos se volvió a destacar su importancia cultural, ambiental y económica, pero también se percibe que las palabras saben más a tributo que a medidas concretas. Porque, más allá de las vitrinas y las imágenes, lo que se necesita es garantizar relevo generacional, apoyo económico y reconocimiento real a quienes aún sostienen un modo de vida en claro retroceso.
Para los jóvenes de la Ruta Inti, que este verano han recorrido los Andes y la Amazonía conviviendo con comunidades indígenas, la visita al stand fue una oportunidad para descubrir que en Albacete también existen saberes ancestrales en riesgo, y que preservarlos es tan urgente como ponerlos en valor.
La Feria ha vuelto a dar protagonismo al pastoreo, y eso es una buena noticia. Pero quizás, más allá del homenaje, sea el momento de abrir un debate serio: ¿qué medidas estamos dispuestos a tomar para que no se convierta en un recuerdo del pasado?
En breve ofreceremos una entrevista con Jorge Escudero ganadero, experto y amante de la Sierra, que sabe mucho de este tema y aportará a buen seguro, soluciones, porque las que se plantean aunque son buenas, como el propio Escudero nos dijo «se suelen quedar en papel mojado».
Foto Diputación de Albacete.
