El Claustro del Centro Cultural La Asunción de la Diputación de Albacete ha acogido este viernes un acto cargado de emoción y simbolismo: la concesión de la Medalla de Oro, de Honor y Gratitud de la Provincia a la futbolista internacional Alba Redondo, Campeona del Mundo en 2023 y primera mujer que recibe el máximo reconocimiento que otorga la institución provincial.
La jugadora, visiblemente emocionada, agradeció una distinción que definió como “un sueño muy bonito” comparable a aquel día histórico del Mundial.
“Es un día mágico que ya forma parte de la historia”, expresó Alba Redondo al recibir la Medalla.
Durante su intervención, dedicó el reconocimiento a sus compañeras del Levante, del Real Madrid y de la Selección Española, así como a sus entrenadores de base, con especial mención a Matías, Vicente y Pato. Tuvo palabras también para el Fundación Albacete, donde dio sus primeros pasos y aprendió —según dijo— a creer en sí misma. La futbolista recordó además a su familia y concluyó con una dedicatoria especialmente emotiva dirigida a su esposa: “Cristina, gracias por aparecer, quedarte y elegirme. Eres mi MVP junto con Olivia”.
El presidente de la Diputación, Santi Cabañero, subrayó la relevancia histórica del momento, recordando que hacía más de ocho años que la institución no concedía esta Medalla, cuyo último destinatario fue el investigador hellinero Juan Carlos Izpisúa. En su intervención destacó el impacto educativo, deportivo y social de la homenajeada.
“Tu aula no tiene paredes. Educa cada vez que te calzas las botas y enseñas a competir desde la igualdad”, señaló Cabañero.
El presidente provincial recordó los inicios de la jugadora en el Fundación Albacete, en una época en que el fútbol femenino apenas tenía visibilidad, y valoró su contribución para llevarlo “a la cima”, a los grandes estadios y al reconocimiento de un país entero. Destacó especialmente lo que Alba ha significado para miles de niñas que ven en ella un referente natural.
“Tu mayor logro está en lo que has despertado: niñas que ya no dudan y dicen ‘Quiero ser como Alba’”, afirmó.
También destacó el carácter histórico del reconocimiento al tratarse de la primera mujer que lo recibe, señalando que aunque llega tarde, su concesión envía un mensaje claro de avance y justicia hacia quienes no pudieron llegar antes.
La ceremonia incluyó un emotivo perfil de la deportista a cargo de su primer entrenador, Matías Martínez, quien recordó a la jugadora como una niña “alegre, entusiasta y llena de ilusión”, subrayando su autoexigencia y disciplina como claves de trayectoria. El público disfrutó además de las interpretaciones musicales de María Elena Calonge y Jorge Real Calonge, del Real Conservatorio de Música y Danza de la Diputación, antes de la imposición oficial de la Medalla y la entrega del pin institucional.
“Gracias a su generación —y en especial a ella— hoy las niñas juegan al fútbol con total normalidad”, afirmó su primer entrenador.
El alcalde de Albacete, Manuel Serrano, también felicitó a la futbolista, destacando la relevancia de este reconocimiento y su papel como embajadora deportiva de la ciudad. Recordó su título de Hija Predilecta, otorgado en 2023, y el nombramiento de los campos situados tras el Estadio Carlos Belmonte con su nombre, en honor a una trayectoria que ha situado a Albacete en el panorama internacional.
La Diputación recordó asimismo que Alba Redondo forma parte de la exposición “Nuestras HuELLAS”, un proyecto que desde 2023 recorre la provincia para visibilizar a mujeres que están dejando una huella profunda en ámbitos como la ciencia, la cultura, la política o el deporte. Una huella que Alba Redondo continúa ampliando, ahora también, desde la historia institucional de su tierra.
Escucha las palabras de Alba Redondo.