La celebración de los Ángeles Custodios, patronos del Cuerpo Nacional de Policía, se convirtió este miércoles en un escaparate para destacar uno de los principales valores de la provincia: su bajo índice de criminalidad, uno de los más bajos de España, y el alto nivel de resolución de los delitos graves.

El subdelegado del Gobierno en Albacete, Miguel Juan Espinosa, acompañado del comisario jefe provincial, Antonio Bueno, y del comisario jefe de Operaciones, Antonio López-Alcahut, presidió el acto subrayando que “es el día en el que toda la sociedad albaceteña reconoce el gran servicio que la Policía Nacional presta, y donde se premia el valor de ser miembro del cuerpo y de quienes colaboran con él”.

Espinosa no eludió la autocrítica y señaló que aún quedan dos grandes retos por delante: la ciberdelincuencia y la violencia de género, fenómenos en aumento en todo el país.

“La provincia de Albacete puede presumir de ser una de las más seguras de España, con un nivel de criminalidad muy por debajo de la media nacional. Sin embargo, la sociedad nos exige estar atentos a nuevas formas delictivas como el fraude digital, y a fenómenos estructurales como la violencia machista”, señaló.

Un contraste con las grandes ciudades

El mensaje cobra especial relevancia en un momento en que en grandes urbes como Madrid, Barcelona o Valencia la sensación de inseguridad ciudadana se ha disparado. Aunque las cifras oficiales varían según las fuentes, lo cierto es que en las grandes concentraciones urbanas los delitos contra el patrimonio, las agresiones y las estafas digitales han crecido notablemente, algo que contrasta con la percepción en una provincia como Albacete, donde la tranquilidad es uno de sus valores diferenciales.

Reconocimientos y despedida emotiva

En el acto, celebrado en la Comisaría Provincial, se entregaron 15 cruces al mérito policial con distintivo blanco a agentes del cuerpo y 4 a personas ajenas a la institución que han colaborado con la Policía Nacional, entre ellos el teniente de la Guardia Civil José Olivares Domínguez y el empresario Ángel Cantos García.

Uno de los momentos más emotivos llegó con la Medalla de Plata de la Policía Nacional al comisario principal Alfredo Garrido López, natural de Cenizate, que se jubila tras 45 años de servicio.

El propio comisario jefe provincial, Antonio Bueno, que se jubilará en enero, vivió también una jornada especial, destacando la importancia de trabajar “con profesionalidad, educación y respeto” y recordando que “las medallas que recibimos también pertenecen a nuestras familias”.

Una provincia segura y orgullosa de su Policía

El acto reunió a autoridades civiles, judiciales, militares y políticas, entre ellas el alcalde de Albacete, Manuel Serrano, y el presidente de la Diputación, Santiago Cabañero.

La jornada sirvió, en definitiva, para proyectar una imagen de Albacete como provincia segura y referente en la lucha contra la delincuencia, un valor que no sólo beneficia a la ciudadanía, sino que también refuerza su atractivo social y económico frente al clima de inseguridad que se respira en otros puntos de España.