La Unidad del Dolor del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete ha dado un paso significativo en el tratamiento de la cefalea en racimos, una de las patologías neurológicas más dolorosas y limitantes que existen.
El servicio ha incorporado una nueva técnica basada en la implantación de electrodos destinados a estimular los nervios occipitales, con el objetivo de reducir el número, la intensidad y la duración de las crisis que sufren los pacientes diagnosticados con este trastorno.
La estimulación de los nervios occipitales permite reducir crisis, intensidad del dolor y necesidad de medicación
La intervención consiste en la colocación de pequeños electrodos en la zona occipital, cuya función es modular la actividad nerviosa relacionada con la aparición de los episodios. Según explica el propio equipo sanitario, esta técnica no solo disminuye el impacto diario de la enfermedad, sino que también puede contribuir a reducir la medicación necesaria en muchos pacientes, mejorando notablemente su calidad de vida.
En los primeros procedimientos realizados en Albacete ha participado el doctor Miguel Barrera, neurocirujano del Hospital Miguel Servet de Zaragoza, considerado uno de los especialistas nacionales en esta técnica. Su colaboración ha permitido afianzar la puesta en marcha del procedimiento en la Unidad del Dolor albaceteña, consolidando este avance como una de las novedades más relevantes dentro del abordaje terapéutico del dolor crónico en Castilla-La Mancha.
La colaboración con especialistas de referencia nacional impulsa la innovación sanitaria en la provincia
La incorporación de esta técnica supone una mejora sustancial para los pacientes que conviven con una dolencia especialmente invalidante, caracterizada por dolores intensos, diarios y de aparición súbita. Albacete continúa así ampliando sus capacidades dentro de la medicina del dolor y afianzándose como un referente regional en tratamientos avanzados dirigidos a patologías neurológicas complejas.