El Ayuntamiento ha instalado recientemente chinchetas reductoras de velocidad en El Gollizo, una medida destinada a mejorar la seguridad vial en un punto considerado especialmente peligroso por los vecinos.
Esta actuación se suma a las labores de limpieza de la carretera que fueron realizadas hace unos días en la misma zona, dentro de las tareas de mantenimiento y acondicionamiento urbano que el consistorio viene desarrollando.
Además, se han colocado bolardos en la calle Valencia y en la plaza del Pintor Murillo con el objetivo de mantener libres las aceras y plazas, garantizando un tránsito más cómodo y seguro para los peatones.
“Seguimos trabajando por unas calles más seguras y cuidadas para todos”, han señalado fuentes municipales en relación a estas mejoras urbanas.
Por su parte, algunos vecinos consultados por Objetivo Sierra de Albacete han valorado positivamente las actuaciones, aunque apuntan que sería conveniente “dar una vuelta por la zona de los colegios, ya que los reductores existentes rallan la ilegalidad vial, aunque eso sí, la efectividad es máxima. Pero claro, en los tiempos que estamos, que se exige legalidad en todo, quien pasa por allí y se deja los bajos en ese bache se acuerda del albañil que lo hizo y del alcalde que lo aprobó”, comentaban entre risas.
De manera más general, la ciudadanía también ha querido destacar el cambio visible en el municipio desde que Daniel García asumió la alcaldía, señalando que “por lo menos vemos el pueblo más limpio y cuidado; al muchacho se le nota interés”, afirmaban varios vecinos.
Otro residente, F. M., añadía que “ahora hay más actividad cultural y se nota más movimiento en el pueblo”.
En conjunto, la percepción general es positiva: los vecinos valoran estas actuaciones como pasos necesarios para mejorar la seguridad, la imagen y la vida cotidiana del municipio.
